Últimamente no he renegado de Dios, ¿que me pasa?, ¿necesito escribir poesía oscura para hacerlo?, ¿no basta solo con pensarlo siempre?, no escribirlo no hará que me acostumbre a esta absurda y asquerosa condición humana que se degenera, envejece y pudre día a día. La pregunta obligada sería: ¿porque estoy dentro de esta "REPULSIVA" y "REPUGNANTE" masa corpórea?. Y sin mencionar las pulsiones de la carne (prisión) que exigen satisfacción inmediata al mas puro estilo kantiano (imperativos categóricos), en fin... terminamos simplemente siendo lo que somos: Inmensas bolsas de "SANGRE Y MIERDA"...!!!.