Positivismo jurídico, estado y maternidad perversa

En la primera infancia, es la madre el primer encuentro con el positivismo jurídico que tenemos, ¿el niño se manejará en función de lo correcto, lo moral y lo ético?, no... ¿verdad?, se manejará "EXCLUSIVAMENTE" en función de premio o castigo... (estímulo - respuesta) la madre representa al estado, pone límites, regula la conducta del niño, corrige y castiga a su absoluta voluntad y antojo.

Hasta que no les llegue la castración, creerán que son un solo ser y que se pertenecen el uno al otro, para la madre... el niño será simplemente su extensión, su propiedad, un resarcimiento "justo" a su falo castrado, lo que llena su falta, su realización como mujer... y buscará insistentemente y muchas veces por la fuerza, que el niño satisfaga todos sus caprichos, en el mejor de los casos, histéricos.

Solo juega la suerte, si naciste del vientre de una madre neurótica, que respeta la ley del padre (castración, leyes por encima de ella), te salvaste... si por el contrario naciste del vientre de una madre psicótica o perversa... toda tu vida será una cárcel, será como vivir una eterna dictadura por que ese fantasma lo desplazarás a tu mujer, y entonces olvídate de tu libertad y de disfrutar la vida.