La praxeología y sus disparates: El hombre actúa

domingo, 30 de noviembre de 2014

Honestidad intelectual y escepticismo, de mis mas grandes valores y principios, no digo que los posea pero siempre pretendo, aun con mucha dificultad, apropiarme de ellos.


El hombre actúa y buscará siempre mejorar sus condiciones:

Hay ciertos fanáticos proselíticos del capitalismo como sistema económico-ideológico que intentan ser tomados en cuenta como filósofos y hasta científicos, astutamente se han apropiado de la libertad como bandera y referente ideológico (como cualquier otra corriente: socialismo, fascismo, etc.), habría primero que discutir si el capitalismo es realmente sinónimo de libertad, también tocaría discutir sobre que es la libertad y que sucede con los que viven dentro de una realidad donde se consideran libres y felices mientras son juzgados desde afuera por vivir en una cárcel. ¿Quienes son realmente libres?, ¿la libertad es relativa?, ¿la libertad es solo una percepción estética de un estado mental-emocional?, ¿realmente somos libres?.

Mises y compañía en algún momento quisieron crear una ciencia del todo que explicaba y hasta predecía la acción humana para justificar sus teorías económicas: la praxeología:

Praxeología es una metodología que busca estudiar la estructura lógica de la acción humana (praxis). El primer postulado de la praxeología es que el hombre es un ser de racionalidad perfecta. Por lo tanto, las ideas de racionalidad limitada son su antítesis. La praxeología centra su atención en el individuo que actúa (individualismo metodológico), sacando de esta observación axiomas o principios elementales, inmutables e incuestionables, con los cuales analizar el proceso de la acción del humano. Por eso si alguno de los axiomas se demostrara falso, entonces se desmoronaría toda la teoría praxeológica. El análisis comienza con las apreciaciones y aspiraciones del consumidor, quien supuestamente operaría basándose en su propia (y siempre mudable) escala de valores. Combinando y entrelazando las escalas de valores de todas las personas se generaría el total de la oferta y la demanda económica (valoración subjetiva).

La praxeología toma a la ciencia económica como la aplicación de axiomas lógicos; y rechaza usar los métodos científicos de las ciencias naturales para estudiar las ciencias sociales. En este punto se debate qué es y cómo se obtiene el conocimiento: los defensores de la praxeología la proponen como una alternativa superior al método científico de las ciencias naturales. Es por eso que la Praxeología puede ser considerada una pseudociencia ya que abiertamente rechaza el método científico. (wikipedia).

La praxeología pretende imponerse como una corriente intelectual dominante entre los ideólogos del capitalismo, promete explicar los fenómenos de la acción humana aun mejor que la psicología, de hecho se entromete en su rama y se jacta de poder predecir sus movimientos.

A la praxeología le calzan las mismas críticas que Karl Popper hizo contra el psicoanálisis en su momento (infalsable por completo, irrefutable, incontrastable, incuestionable, siempre verdadera y con respuestas absolutas) y por las cuales Jacques Lacan, psicoanalista francés, renunció a darle estatus de ciencia, filosofía y hasta de psicología, llegando al punto de definir al psicoanálisis como solo psicoanálisis... incluso lo ubicó mas del lado del arte, un repliegue mas que adecuado y conveniente para mantenerse vivo dentro del campo de las pseudociencias de forma honesta y evitar así caer en el oscuro abismo del esoterismo. Muy poco le sirvió a Lacan introducir en el psicoanálisis los conceptos de lógica, matemáticas, linguistica, etc., a la larga no pudo sostener ni demostrar la universalidad del complejo de edipo como nombre o ley del padre (pese a tener un carácter casi axiomático dentro de la estructuración del lenguaje) y cedió ante las críticas con suma tristeza, incluso se dice que estas fueron la causal de retiro en los últimos años de su vida.

La ciencia debe ser falseable, según el filósofo Karl Popper, el psicoanálisis no cumple las características suficientes para ser considerada una ciencia porque "siempre tiene la razón".

Lacan sin embargo estuvo de acuerdo con Popper: “Lo que tengo que decirles, afirmó hacia el final de su enseñanza, es que el psicoanálisis debe ser tomado en serio aún cuando no sea una ciencia. Porque lo enojoso, como lo ha mostrado sobreabundantemente un llamado Karl Popper, es que no es una ciencia porque es irrefutable”. En la misma época el mismo Lacan aseguró, fundamentalista, que la ciencia, la refutable, “es una futilidad que no tiene peso en la vida de nadie, aún cuando tenga efectos, la televisión por ejemplo".

Las críticas de Popper son sencillas de entender: toda ciencia debe ser falseable porque las teorías por mas científicas que sean no deben ser un fin si no un medio para hacer ciencia y esta debe prevalecer por su historia como epistemología y su finalidad de crecimiento infinito, las teorías y las corrientes deben ser descartables, absolutamente desechables porque solo sirven como utilidad y proceso para seguir haciendo ciencia. Si se llegase a una teoría del todo que siempre tiene la razón, entonces ya no habría mas desarrollo científico, se acabaría ipso facto, la humanidad habría llegado a la perfección y podría responder todas sus dudas y es evidente que aun las tenemos y que la ciencia con vida siguiendo el método de la autocrítica y la autocorrección o, por decirlo de una manera más intrincada, siguiendo el método de las conjeturas y el ensayo de refutación.

El psicoanálisis ya tuvo un largo recorrido de pretenciones y petulancias arribistas, la humanidad ha sido enormemente influenciada por las teorías freudianas que quedaron plasmadas en grandes corrientes filosóficas, políticas, científicas, artísticas, literarias, musicales, cinematográficas, etc. hasta el punto de que mucha de su terminología pasó al uso del lenguaje común en una sociedad consciente en cierta forma quien fue Sigmund Freud, que es el complejo de edipo, el inconsciente, etc. La cultura popular del siglo XX fue marcado en gran medida por la teoría psicoanalítica en infinidad de áreas incluso a nivel económico, grandes campañas publicitarias como la del hombre Marlboro tuvieron un impacto enorme en la población gracias a su representación fálica y fueron realizadas gracias a nociones de teoría psicoanalítica.

No fue suficiente el éxito y el inmenso auge de popularidad en la cultura para llevar al psicoanálisis a nivel de filosofía y peor de ciencia, las intenciones de Lacan fueron impresionantes y plausibles, se podría decir hasta que casi lo logró, pero nunca pudo renunciar a ciertos dogmas freudianos infalsables, no si pretendía ponerse el manto de sucesor promoviendo un retorno a las lecturas de Freud.

Creo que esta es una lección de lo que no se debe hacer o al menos de lo que se puede intentar aun sabiendo los riesgos y un inevitable y trágico final, en lo personal detesto el concepto de humildad pero habrán quienes digan que lo que vivió el psicoanálisis fue una lección de humildad, para mi es una asunción de honestidad, de un compromiso con el escepticismo y con el ideal de verdad, es un encuentro con el fracaso y una oportunidad de triunfo como premio a la constancia, el psicoanálisis así ya lo vivió, hace muchos años, bien podría decirse que lo sobrevivió y hoy en día se mantiene así... como una hermosa pseudociencia que nos hace creer en la esperanza de pese a vivir sujetos a una realidad cruda y cruel, podamos al menos encontrar un sentido a todo esto.

Hay que hacer una diferenciación entre praxeologías, el nombre original se usó por primera vez en 1608 por el filósofo, físico y teólogo Alemán Clemens Timpler (1563-1624) en su obra Philosophiae practicae systema methodicum, la definición conceptual posterior está acreditada al sociologo, filósofo y pensador francés Alfred Espinas (1844-1922), quien intentó establecer pautas paraxeológicas según el estudio de la etología en su obra Des sociétés animales (1877), autor con gran influencia de Darwin y Nietzsche, primero adherente al positivismo y convertido luego al realismo filosófico. Los dos autores previos y el concepto original de praxeología no guardan ninguna relación con la obra del economista austriaco Ludwig von Mises y sus seguidores de la Escuela de Viena, también denominada Escuela Austríaca de Economía. De hecho su concepción original está ligada totalmente a la etología y se considera a la praxeología como rama e influencia del conductismo como corriente psicológica, ya que ambos buscaron explicar la conducta humana a partir de la conducta de los animales.

Pues bien... esta vil suplantación o "praxeología moderna" pese a tener más de 60 años, llega muy atrasada, estudia (como dicen los austrolibertarios) aspectos de la acción humana que pueden ser captados a priori y utiliza un simple método axiomático-deductivo, cuyo axioma es la descripción de una conducta racional, a partir de la cual se infieren lógicamente una serie de conclusiones o teoremas praxeológicos. Según ellos con la praxeología toda acción humana puede explicarse mediante leyes apriorísticas de cómo actúan las personas en determinadas condiciones. Siendo así tan claras estas verdades auto evidentes, me sorprende que no hayan sido planteadas antes.

Los economistas austriacos dicen aplicar el método lógico-deductivo pero para esto se necesita un sistema formal y la escuela austriaca no lo presenta. A lo que llaman deducciones son simplemente discursos intuitivos. Son anti consecuencialistas y dogmáticos, dejan que su ideología contamine sus desarrollos científicos: es decir, colocan la ciencia al servicio de la ideología en lugar de modular su ideología en función de los hallazgos científicos disponibles, cayendo por supuesto en el sesgo de confirmación.

Sus elegidos creen que la praxeología es la respuesta para todo, que con ella podrán explicar las razones del porque de la acción humana y además predecirla, sus estudiosos tienen ese brillo en los ojos de cuando iniciamos el largo camino en el estudio de la teoría psicoanalítica, es ese sentimiento del primer amor que le dicen los evangelistas al encuentro con una verdad que apasiona y que en primera instancia llena todos los vacíos y responde a todas las dudas (negando la falta), pero como todo amor, verdadero o falso... dura poco.

Los evangelistas al menos se retroalimentan constantemente reuniéndose en grupos los domingos, para reforzar las estructuras del sistema dogmático con renovadas negaciones y certezas. ¡Funciona!, y es que así funcionan las retroalimentaciones en las terapias grupales, pero llega un momento en el cual uno se da cuenta que ya no-todo está dicho y es cuando comienzan a aparecer las dudas. La mayoría de grupos dogmáticos temen a los escépticos, son un peligro mayúsculo, llegan con dudas donde solo deben haber certezas y eso debilita al grupo y al dogma, personas así son expulsadas, son calificados de subversivos, de traidores, de cambiarse al otro bando, de inconstantes, y hasta de que nunca formaron parte del grupo en realidad, es muy común entre los evangélicos negar a quien dejó el evangelismo acusándolo de nunca llegar a ser un verdadero cristiano, porque de entrar verdaderamente Jesús en su corazón, jamás dejaría la fe y sería converso para siempre.

Me resulta extremadamente interesante observar la evolución de los actuales praxeólogos, primero libertarios, luego anarcocapitalistas, después austrolibertarios - austroanarquistas, hasta hace poco se hacían llamar tan solo austriacos, y como poco a poco se enfrentan duramente a la realidad en sus pretenciones de posicionarse como grupo de poder con influencia intelectual, ya dejaron atrás la triada libertaria universal, objetiva, absoluta e inmanente de "vida, libertad y propiedad", también quedó atrás el iusnaturalismo esotérico, al menos los mas estudiosos ya no creen en tanto misticismo, ahora leen a Hans-Hermann Hoppe que recomienda dejar a un lado esas patrañas delirantes y recomienda leer filosofía del lenguaje, filosofía del derecho y filosofía analítica, aun pese a esta notable evolución los praxeólogos son un think tank condenado al fracaso en la misión de posicionar su teoría a nivel de ciencia y filosofía.

La praxeología pretende quizá plantear, como una especie de cogito cartesiano que "el hombre actúa" (libremente por cierto) como una premisa universal, ¿porque no mejor usar "el hombre piensa" de Descartes?, quizá... porque eso no les daría la originalidad que pretenden o porque dan por sentado que si piensa entonces existe (y luego actúa supongo). El "por lo tanto" del cogito es un punto en el cual me voy a extender un poco.

El cógito cartesiano de Descartes sufrió un terrible error de traducción, puesto que no es "pienso luego existo", en realidad es: "pienso... por lo tanto existo", esta frase es la etapa culminante de un razonamiento donde Descartes en su afamado proceso de encontrar la verdad, se dedicó a dudar de todo (duda metódica) pero se dio cuenta de que había algo de lo que no podía dudar y era de su propia existencia, lo entendió así porque si pensaba entonces existía.

Descartes, deseando encontrar la verdad, rechaza como falso todo aquello en que pudiera imaginar la menor duda. Así, puesto que los sentidos nos engañan, quiso suponer que no hay nada que sea tal como ellos nos lo hacen imaginar; y como hay hombres que se equivocan al razonar, juzgó que estaba tan expuesto a error como cualquier otro y rechazó como falsos todos los razonamientos, que antes había tomado por demostraciones. También consideró que los pensamientos que tenemos cuando estamos despiertos, también pueden ocurrírsenos estando dormidos, sin que en tal caso sea ninguno verdadero. Decidió que todas las cosas que hasta entonces habían entrado en su espíritu no eran más ciertas que las ilusiones de sus sueños. Llegó a la conclusión de que no existe nada cierto: " La única verdad a la que la duda fortalece en verdad es a mi propia existencia, pues para ser engañado necesito existir ". Un día encontró la verdad, la existencia del yo pensante: Cogito Ergo Sum, esto era irrefutable y lo aceptó como el primer principio de su filosofía. El Cogito es el principio no sólo de su metafísica, sino también de la física; proporciona el criterio de verdad, que se presente en forma directa e inmediata al espíritu. El hombre puede fingir que no tiene cuerpo alguno, pero no puede fingir que no es; el hombre es una sustancia cuya total esencia o naturaleza es pensar y no necesita para ser, de lugar alguno ni depende de cosa material. El alma es distinta del cuerpo y más fácil de conocer que él, y aunque el cuerpo no fuese, el alma no dejaría de ser cuanto es. Lo que se requiere para que una proporción sea verdadera y cierta es que la concibamos muy clara y distintamente, al igual que la proposición "Pienso por lo tanto existo". Reflexiona pues, que su ser no es perfecto pues en él está la duda; y hay mayor perfección en conocer que en dudar. La duda puede alcanzar el contenido del pensamiento, pero no al pensamiento mismo. Puedo dudar de la existencia de lo que veo, imagino o pienso, pero no puedo dudar de lo que estoy pensando y que, para pensarlo, tengo que existir.

Jacques Lacan hizo una modificación interesante al cogito cartesiano:

"Pienso donde no soy, soy donde no pienso"

En la frase el "No pienso" corresponde al ello freudiano (instintos) y el "No soy" representa al inconciente, freudiano tambien. Lo que Lacan quiere decir con ello es que el ser existe, aun cuando su pensamiento sea contrario o no "exista" en determinadas areas, por ejemplo en aquello que desconoce, o en donde los institnos guian sus acciones.

La praxeología lanza muy audazmente la premisa: "el hombre actúa" y luego establece (muy alegremente) que universalmente siempre actuará en pos de mejorar sus condiciones y con esto llegan a la conclusión de que tales condiciones (lejos de lo que podría significarle estéticamente a cada sujeto) dejarían en evidencia la axiomática verdad objetiva de que solo el capitalismo es capaz de mejorarlas.

El término estética (del griego αἰσθητική [aisthetikê], ‘sensación’, ‘percepción’, y este de αἴσθησις [aísthesis], ‘sensación’, ‘sensibilidad’, e -ικά [-icá], ‘relativo a’) tiene diferentes acepciones. En el lenguaje coloquial denota en general lo bello, y en la filosofía tiene diversas definiciones: por un lado es la rama que tiene por objeto el estudio de la esencia y la percepción de la belleza, por otro lado puede referirse al campo de la teoría del arte, y finalmente puede significar el estudio de la percepción en general, sea sensorial o entendida de manera más amplia. Estos campos de investigación pueden coincidir, pero no es necesario, (wikipedia).

Como siempre estas teorías del todo se derrumban ante las falsaciones como pruebas de estrés, pretenden englobar la universalidad del pensamiento humano desde el sesgo de la moral, lo correcto, lo justo y hasta lo positivo-motivacional, pero... ¿que sucede con quienes se escapan de la normalidad?, psicópatas, idiotas, gente con racionaliad limitada, bajo coeficiente intelectual, retrasados, enfermos, dementes, etc. Desde la economía ya se escuchan voces críticas a las teorías praxeológicas puesto que el primer postulado de la praxeología es que el hombre es un ser de racionalidad perfecta (hiperracionalismo), las ideas de racionalidad limitada son su antítesis:

La racionalidad acotada o racionalidad limitada es un modelo de racionalidad humana propuesta para modelizar en ciencias sociales, especialmente en economía, la forma concreta de actuación de los agentes sociales. Herbert Simon, en Models of Man ('Modelos del hombre'), señala que la mayoría de las personas son sólo parcialmente racionales y que, de hecho, actúan según impulsos emocionales no totalmente racionales en muchas de sus acciones (Simon pone a Albert Einstein como ejemplo de racionalidad acotada, en sus intentos por perseguir áreas de trabajo abandonadas por otros científicos), (wikipedia).

¿Qué implica mejorar las condiciones?, ¿un adicto a una droga autodestructiva busca mejorar sus condiciones?, quizá lo pretenda al inicio, ciertamente el alcohol es usado como recurso para superar las aflicciones pero a la larga se convierte en algo peor, ¿quienes plantean que la libertad es lo mas preciado del ser humano justifican vivir esclavos a una adicción como ejemplo de mejorar sus condiciones?, ¿el suicida busca mejorar sus condiciones?.

Habría que jugar y definir, dentro del paradigma de la objetividad... que significa ese "mejorar las condiciones" y que significa autodestruirse, dentro de este juego se podría determinar fácilmente que todo lo que atente contra la existencia humana es destructivo siendo una de las principales razones según los praxeólogos austrolibertarios para inferir que el socialismo es destructivo y hasta inmoral porque atenta contra la libertad y destruye el progreso de la sociedad (cuestión meramente estética nuevamente).

El demente quizá debería ser excluido de la universalidad (entonces ya no tan universal) de que todos los seres humanos buscarán siempre mejorar sus condiciones, sin embargo, en la intención de los praxeólogos de ser tomados en cuenta como poseedores de la verdad absoluta y tapar los huecos de sus teorías, se atreven a decir que efectivamente el suicida busca mejorar sus condiciones porque libre y voluntariamente decide que la muerte es la solución para una vida llena de dolor y pesar, por lo tanto el demente, el suicida, el adicto, las personas normales, niños, ancianos, etc. todos buscarán siempre mejorar sus condiciones con sus acciones sean las que sean y esta sería para todos una verdad universal, absoluta e innegable.

No voy a entrar mayormente en valoraciones morales de si es correcto o no suicidarse ya que soy un fiel defensor de la potestad de cada cual a autodestruirse, no obstante si defino ciertas acciones como autodestructivas, independientemente si son producto o no de algún trastorno mental (paradigma psicológico).

El concepto de goce en el psicoanálisis ya trató desde hace muchos años como la satisfacción + pulsión de muerte se unen para buscar la autodestrucción:

Según Sigmund Freud, pulsión de muerte (o pulsiones de muerte) es la tendencia inherente a toda vida orgánica que se evidencia en actos encaminados a la búsqueda de un estado anterior a la vida.

Dentro de la última teoría freudiana de las pulsiones, designan una categoría fundamental de pulsiones que se contraponen a las pulsiones de vida y que tienden a la reducción completa de las tensiones, es decir, a devolver al ser vivo al estado inorgánico.

"Las pulsiones de muerte se dirigen primeramente hacia el interior y tienden a la autodestrucción; secundariamente se dirigirían hacia el exterior, manifestándose entonces en forma de pulsión agresiva o destructiva", (wikipedia).

Para Freud, la pulsión de muerte es natural, el consideró que la vida orgánica no es nada mas que un accidente dentro de una constante inorgánica (antes y después de la vida), la pulsión de muerte solo busca satisfacer la necesidad de regresar a un estado inorgánico, como si la vida estuviese atada a un elástico que tarde o temprano regresa hasta su origen.

Dentro del concepto de pulsiones, mucho mas fino que el de instintos, se plantea que todo sujeto buscará satisfacerlas y que el goce aunque presente, está regulado en los neuróticos (normales), ¿qué sucede entonces en el gozador?, el gozador no se sacia ante la satisfacción de la pulsión, es voraz y niega la necesidad de frenarse y ponerle límites a la búsqueda de satisfacción para poder alcanzarla después quizá aun con mayor intensidad, el gozador busca gozar de una satisfacción ya satisfecha (gozada) donde solo encuentra desgaste, angustia y por ende autodestrucción.

Como ejemplo muy vulgar (y me disculpo con suma vergüenza), y solo esperando que los praxeólogos me entiendan, trataré el caso del hambre. Huerta de Soto habla de la ley de utilidad marginal como una ley universal económica pero... ¿que sucede con los que sufren de trastornos de ansiedad, depresión, estrés, etc. que comen aun ya satisfecha su hambre y que la psicología trata como un síntoma de quienes buscan llenar una falta, una pérdida o quizá sobrellevar un duelo?, si... me refiero al infame pecado de la gula, ese buscar satisfacer lo ya satisfecho sin poder encontrar la satisfacción que logró inicialmente, este es un ejemplo (bastante vulgar y por demás silvestre), de lo que sería el gozar dentro de la concepción de la teoría psicoanálitica.

Leer: El mito de la praxeología.

El que disfruta bebiendo alcohol, lleno de alegría y jolgorio, quizá si buscará mejorar sus condiciones, independientemente que esté matando sus neuronas, pero... ¿y el que tiene cirrosis en el hígado y aun sabiéndolo sigue bebiendo?, ¿porqué lo hace?, sencillo pues... porque goza.

El caso de los adictos es especialmente ejemplarizador ya que poseen no solo una adicción psicológica si no una adicción física (diagnóstico médico-neurológico), si todo sujeto busca mejorar sus condiciones y se pretende negar o quitarle importancia a la adicción psicológica argumentando que el sujeto es libre para expresar su voluntad de seguir gozando, ¿como se trataría entonces la adicción física?, ¿un consumidor de sustancias que provocan una elevada adicción física y que necesita incluso medicamentos antídotos para limpiar su organismo y dejar de consumir, es realmente libre para decidir si su consumo mejora sus condiciones?, si fuese así entonces solo sería suficiente la voluntad para dejar una adicción sin embargo casi nunca es suficiente aun bajo el expreso deseo de superarla, y es justamente por que su adicción física le destruye la voluntad.

¿Un sujeto que sufre una severa adicción física a una sustancia, buscará mejorar sus condiciones consumiendo o dejando de consumir lo que lo destruye?, ¿podrían ser ambas?, no lo creo... y es precisamente la crítica que hace Popper a las teorías infalsables como esta, para la praxeología si el adicto busca consumir drogas entonces buscará mejorar sus condiciones y si busca por el contrario dejar de consumirlas también, no toma en cuenta el deterioro físico, psicológico, familiar y laboral que dejan el consumo de drogas como consecuencias con el fin de identificar si destruye o no al sujeto.

Ampliando el análisis y sin explorar mayormente casos tan extremos, los cuales por cierto cuestionan la universalidad de las deducciones a partir del axioma praxeológico, el simple hecho de que muchos de nosotros aun siendo seres racionales, gocemos en mayor o menor medida (tabaco, alcohol, café, etc.) con diversos niveles de regulaciones, hace muy difícil el poder predecir la acción humana según sus intereses económicos.

Los praxeólogos se gradúan de astutos, no pierden el tiempo cuestionando la racionalidad o la normalidad, plantean convenientemente que todo ser humano posee una racionalidad perfecta, esperando que sus acólitos acepten esto como un argumento ad populum devenido a verdad universal. Pese a todo, debo reconocer que aunque solo dentro del conjunto universo de personas racionales y aunque suene a copia barata del cogito cartesiano, la praxeología es irrefutable como axioma, ya que efectivamente el hombre racional si actúa (para bien o para mal), lo verdaderamente preocupante es que sean los praxeológos quienes lleguen a apropiarse de la exclusividad del estudio de las acciones humanas, como ya pretenden... con falacias, demagogias, mentiras, a golpes, a empellones, etc., todo vale con tal de hacerse un espacio, el único que les falta para ser tomados en serio.

Hay que tener en cuenta que las deducciones inferidas a partir de este axioma de la acción humana, pueden ser fácilmente adaptadas quizá a cualquier postura ideológica-religiosa ya que son incontrastables, y pese a que afirman interesarse mas en lo medios que en los fines de la acción humana, se jactan de poder "demostrar" la eficacia de sus predicciones según sus efectos y resultados en las relaciones del mercado (catalaxia). Esto es tan fácil como actuar cual shamán que lanza una maldición y espera que su maldito se muera por muerte natural para demostrar que su magia es poderosa, de hecho... para no perder credibilidad, un shamán inteligente siempre escogerá a sus víctimas habiendo estudiado previamente sus debilidades y es la razón por la que la praxeología no se involucra mayormente en la economía formal y solo se concentra en los medios de la acción humana ya que sus afirmaciones jamás podrían convertirse en algoritmos matemáticos y solo quedan como tips útiles o consejos motivacionales al estilo de cualquier revista de variedades.

Como ejemplo expongo la famosa ley de la preferencia temporal, que en su momento ya fue protagonista de un escándalo mayúsculo donde Hoppe fue acusado de "considerar opiniones como si fueran hechos objetivos”:

Ley de la preferencia temporal: "Siempre se prefiere poder disponer de un bien en el momento presente a poder disponer de él en un momento futuro".

Parece un tip o consejo de revista de variedades, como mucho el resultado de alguna encuesta con cierto tratamiento estadístico pero jamás una ley objetiva, esa ley me recuerda a la frase "mejor pájaro en mano que cientos volando", muchas leyes supuestamente universales y axiomáticas son similares y dado que el hombre actúa, los praxeólogos se acreditan el derecho a estudiar las acciones humanas solo porque el término praxeología implicaría el "estudio de la praxis humana".

El psicoanálisis freudiano, en su topología, también habla de leyes universales de la economía del psiquismo en cuanto a las pulsiones, la líbido como energía psíquica, el inconsciente, los instintos, etc. los resultados que demuestran su funcionamiento se los obtiene durante la labor psicoanalítica, terapéutica o no.

El esoterismo también habla de leyes universales de la acción humana, una muy famosa es la ley del karma, del cual millones son seguidores porque ven y valoran los resultados en sus vidas pese a que es imposible relacionar y demostrar la causa-efecto, al menos no de forma lógica y coherente, sin embargo viven según las leyes del karma y aseguran que se expresa a diario en sus vidas.

Estas teorías metafísicas que explican la acción humana (Freud denominó al psicoanálisis como metapsicología), al igual que el karma, están presentes y son válidas como opiniones, visiones, versiones, verdades y un amplio etcétera dentro del terreno de las pseudociencias y lo que Immanuel Kant denominó "construcción de realidades" (constructivismo) dentro de las cuales, muchas ideologías y religiones bien podrían inferir distintas "leyes universales" muy a conveniencia, siempre y cuando usen argumentos sólidos y buenos artificios-recursos retóricos, no me sorprendería que en poco tiempo aparezca una praxeología del socialismo descubriendo verdades aun mucho mas "auto evidentes" y universales a partir del axioma de que el hombre actúa, usando el mismo método axiomático-deductivo para justificar un sin fin de acciones en la conducta humana (de hecho mucho de la teoría marxista tiene ya suficiente de eso), será solo cuestión de tiempo, identificación con el agresor y resignificación de conceptos, nada mas.

Immanuel Kant (1724-1804) mientras distinguía entre el fenómeno y el noúmeno (o cosa en sí) afirmó que la realidad no se encuentra fuera de quien la observa, sino que en cierto modo es construida por su aparato cognitivo.

Quizá solo sea que los praxeólogos entendieron mal a Descartes leyendo la traducción equivocada y al copiar el axioma heredaron el error, y pues definitivamente no siendo "pienso... luego existo" tampoco sería "el hombre actúa... luego buscará mejorar sus condiciones", porque con la traducción correcta el "pienso, por lo tanto existo", sonaría a disparate un "el hombre actúa, por lo tanto buscará mejorar sus condiciones", ya que no hay ninguna coherencia lógica.

En el amplio rango de las pseudociencias unas pueden ser mas disparatadas que otras, queda a juicio de cada quien decidir cual dice mas disparates (psicoanálisis, praxeología, homeopatía, astrología, etc.).

El hombre actúa... actúen pues de forma racional.